lunes, 11 de abril de 2011

Grandes retos

Hay trenes que sólo pasan una vez en la vida. Oportunidades que son tan repentinas que hay que cogerlas al vuelo. En esta ocasión se trata de trabajo. Un puesto como camarera en una compañía de alcance internacional al otro lado del charco. Disney Cruise Line.

Tras enviar el currículum y pasar la entrevista, si todo marcha sobre el plan trazado en menos de dos meses nos estaremos embarcando en uno de sus barcos para, más adelante, cruzar mares y océanos hasta el resort más famoso de la compañía en Orlando.

Eso significa que, efectivamente, mi experiencia en Londres se queda aquí por el momento. Quién sabe lo que me depara el futuro. Porqué una ya no sabe qué pensar. Si mi destino es estar aquí de vuelta o no, ya se verá. Lo que importa ahora es que he tomado una decisión nueva e inesperada pero que afronto con muchas ganas e ilusión.

Que alguien me pellizque...

Se presenta una temporada de duro trabajo con jornadas interminables de las que ya hemos sido alertados. Porqué no es oro todo lo que reluce. Y a pesar de entrar a formar parte de algo tan grande y de tal envergadura, nadie dijo que fuera fácil...

De todas formas, mi blog no se acaba aquí. Porqué estoy segura que tampoco soy ni la primera ni la última que afronta grandes retos en su vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario